Una obra de Sheila Jasanoff traducida al castellano por Dulcinea Otero-Piñeiro
Sheila Jasanoff ofrece aquí una reflexión interesantísima sobre los desafíos que plantea la biología molecular moderna a la sociedad actual en todas sus dimensiones: económica, filosófica, ética, política, medioambiental…
La irrupción en las sociedades capitalistas actuales de la nueva y lucrativa ciencia de la biotecnología conlleva unas consecuencias enormes dadas sus múltiples aplicaciones: secuenciación genómica, manipulación genética, selección de embriones, reproducción asistida, organismos genéticamente modificados, terapias génicas, diagnóstico genético, rejuvenecimiento e inmortalidad, producción de alimentos, aborto.
A partir de un enfoque global de la ciencia y la tecnología genéticas se tratan aspectos clave como la naturaleza de estas disciplinas desde el punto de vista de la filosofía de la ciencia, la naturaleza del descubrimiento científico, las fronteras entre ciencia pura y aplicada, las implicaciones morales y culturales de los nuevos hallazgos y tecnologías, la interacción entre la ciencia genética y la industria y la economía, así como el encaje legal de los desafíos éticos implicados (patentes, manipulación genética, aspectos medioambientales).
La relevancia de la ciencia en casi todos los ámbitos de la vida moderna es indiscutible y, por tanto, la biología molecular participa también de esa realidad. ¿Hasta qué punto la supuesta capacidad de la ciencia para regularse a sí misma ofrece garantía suficiente de que no se traspasarán líneas rojas moralmente inaceptables para la sociedad? ¿Tiene sentido imponer leyes sobre los límites de la investigación y la experimentación en biología? ¿Qué interrelación existe entre ciencia, moral y legislación, por un lado, y el creciente poder económico que está adquiriendo la industria basada en la genética, por otro?
Para responder todas estas preguntas, que trascienden lo puramente científico, hay que plantearse antes de nada qué es la vida, qué sentido tiene o qué sentido queremos atribuirle. Y esta es una de las cuestiones más interesantes en las que profundiza la autora.
La traducción de este libro me enfrentó a reflexiones complejas que requirieron meditar con detenimiento la traducción de ciertos pasajes. Sin duda, la expresión que más problemas me causó fue «sense-making» y otras equivalentes, como «make sense», que aparece en el propio título original. Esta es una de las nociones más repetidas a lo largo de la obra y difícil de trasladar a nuestro idioma en los diversos contextos en que aparece. A ello se debe la búsqueda de un título alternativo para la versión en castellano. El elegido fue una propuesta de la propia autora y nos pareció bastante más sugente que el original en inglés (el cual se ha incluido como subtítulo de la edición en Alianza).
Un capítulo que me resultó especialmente interesante por su vertiente lingüística es el titulado “Juegos del lenguaje”, donde se evidencian las numerosas connotaciones que llegan a tener los nombres que asignamos a las cosas.
Texto de Dulcinea Otero-Piñeiro
Sheila Jasanoff, La arrogancia de la biología: ¿Puede la ciencia dotar de sentido a la vida?, Alianza Editorial, 2021 (traducción al castellano de Dulcinea Otero-Piñeiro), 260 páginas.
Reseña sobre esta obra en NCYT (febrero de 2021)
Reseña sobre esta obra en Alianza Editorial (enero de 2021).